sábado, 23 de marzo de 2013

Cuando la realidad supera a la ficción


Las películas logran transportarnos a otros mundos. Las películas, nos hacen reflexionar, nos hacen pensar, nos hacen vivir la historia de un personaje, nos tocan la fibra sensible, nos evaden de la realidad. Hay veces que llegan a ser realmente inspiradoras,tanto,que nos hacen emerger nuevos pensamientos o visiones acerca de nuestra vida o de nosotros mismos. El 28 de Diciembre de 1985,los hermanos Lumière proyectaron la salida de los obreros de una fábrica francesa en Lyon,la demolición de un muro,la llegada de un tren y un barco saliendo de un puerto. Ese momento,marcaría un antes y un después en la historia. Se había creado el cine, y como consecuencia de ello,se rodaron innumerables películas. Así, el cine se convirtió en el séptimo arte. Hasta la fecha, en el mundo se han producido millones de películas y con ellas se han narrado millones de historias. Historias basadas en los típicos cuentos que nos han contado cuándo éramos pequeños,historias que desde un principio sabíamos como iban a acabar o historias que nos descolocan con un inesperado final. En la vida real, los finales felices son escasos y lejanos entre sí. Quizás por eso necesitamos las películas, para recordarnos que pese a todo, las cosas menos pensadas pueden surgir en los sitios menos probables. Hay veces que nuestra vida se torna como una película, pero en lugar de ser un mero espectador tomamos el papel protagonista. Vivimos el guión que poco a poco vamos escribiendo con nuestras decisiones, con nuestros aciertos,con nuestros errores. Y nos sorprendemos cuándo nos sucede algo inesperado, o cuando rompemos con el guión,cuando la vida real supera con creces a la ficción.

sábado, 16 de marzo de 2013

La filosofía de la hormiga


A pesar de ser diminutas en relación a la complexión humana, las hormigas pueden levantar cincuenta veces su propio peso. Este pequeño insecto que tiene una gran capacidad de resistencia, posee una gran perseverancia. Las hormigas nunca se rinden. Si ellas se han propuesto ir por un lado y tratamos de detenerlas; ellas buscarán otro camino para continuar. Para alcanzar nuestros propósitos o nuestros sueños, quizás debemos seguir la filosofía de la hormiga, nunca rendirnos buscando todas las maneras posibles para llegar a aquello que queremos conseguir. A parte de ser perseverante, las hormigas durante el verano piensan en la fría estación del invierno. Recogen y almacenan la comida del verano para hacer frente a la dura estación invernal. No podemos ser tan ingenuos de pensar que el verano durará eternamente, es decir no podemos creer que siempre todo nos va a ir bien y actuar sin pensar en las consecuencias. Vivimos en una sociedad cambiante en la que hoy puede ser seguro, mañana puede no serlo. Por ello es importante es ser realista, y pensar con cabeza de cara al futuro.Otro aspecto a destacar de estos diminutos insectos es que durante el invierno piensan en el verano. Las hormigas después del gélido invierno volverán a salir a la luz del sol. Así como el verano no dura eternamente, el invierno tampoco. Si de verdad quieres conseguir algo,se perseverante,se consciente de que ni las buenas rachas ni las malas duran para siempre y que con trabajo y esfuerzo, todo se consigue.




sábado, 2 de marzo de 2013

Un genuino libro en blanco.

Si nuestra vida fuera un libro podríamos dividirla en numerosos capítulos.Si fuera así,habría capítulos para recordar y otros que quizás nos gustaría arrancar o que simplemente desearíamos que no se hubieran escrito. En cada etapa de nuestra vida hay cambios que generalmente están marcados por grandes sucesos. Momentos que marcan un punto de incisión entre el día de hoy y el de mañana. El día en el que te marchas de casa dispuesto a cumplir un sueño,el día en el que te gradúas,el día en el que te enamoras... Y todo cambia en cuestión de segundos. Los mejores cambios llegan en pequeños momentos,cuando nos paramos y vemos quiénes somos. Cada vez que echamos la vista atrás y observamos lo lejos que hemos llegado,también vemos aún lo lejos que podemos llegar. Para poder cambiar completamente, puede que necesitemos liberarnos de todo a lo que nos aferramos y nos impide seguir adelante. Enfrentar a nuestros miedos día a día y avanzar para sí conducirnos por un nuevo camino. El correcto. Si un día despiertas y te das cuenta de que la persona en la que te has convertido no es la persona que quieres ser... Siempre puedes volver atrás e intentarlo de nuevo,reescribiendo un nuevo capítulo.